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Pedro J. Ramírez Perdomo
Lunes, 13 de septiembre de 2.010
Ya mencionamos que en nuestro primer libro de ProPaz, llamado “Estudios sobre la Nueva Ley de Servicio Comunitario del Estudiante de Educación Superior”, de Ediciones Paredes, escribimos un artículo llamado de la “Responsabilidad Personal a la Social, mediante la aplicación de la Justicia, la Moral y la Ética en la vida cotidiana”, que comenzamos así:
En nuestro mundo, hoy convulsionado y vertiginosamente cambiante, tenemos la necesidad imperiosa de poseer conceptos muy bien definidos para lograr acciones efectivas. Al menos para poder prosperar en la sociedad y vivir sin las asperezas que entorpecen ese progreso. Pero no solamente el tener presente esos conceptos, sino además tener la suficiente confianza en nuestros recursos interiores, el valor y la energía personal necesaria para aplicarlos. Nuestras leyes, tratados internacionales, constituciones en todos los países, establecen disposiciones que aspiran a lograr la paz y el orden social, pero aun así muchas no logran su cometido y se estrellan frente a una realidad bastante adversa, lo que tiende a provocar en quienes dictan esas leyes, que la situación se resuelva mediante el establecimiento de mayores sanciones. Y también se equivocan. Esas leyes se refieren a conceptos como justicia, justicia social, ética, valores que no provocan en la comunidad ningún impacto, ni en los lectores de esas disposiciones legales ninguna reacción, valoración o comprensión como para que se hagan efectivamente aplicables. Todos tenemos un concepto diferente y a veces contradictorio sobre la justicia, la verdad, la libertad, la moral, la ética, y pocas veces despiertan en nuestro interior esos conceptos alguna emoción. Si entendemos por justicia la que es impartida por los órganos del poder judicial, ésta podrá estar alejada de nuestro entorno personal, puesto que no todos hacemos uso de ese poder nacional. Si por justicia entendemos la que yo realizo, mediante la imposición de mis criterios, de mis ideas o conciencia, podemos caer en lo que se ha dado por llamar “ajustes de cuentas”, como el “hacerse justicia por sí mismo”, que evidentemente no es recomendable para nadie.
Con relación a la Justicia, ya lo tratamos en nuestro programa radial del 7 de junio pasado, que puede ser oído o leído mediante los vínculos electrónicos en nuestra página Web. En las próximas semanas trataremos sobre la Verdad y la Libertad, la moral y la ética, de manera que recomendamos escuchar atentamente nuestros siguientes programas por esta misma estación, los cuales estamos seguros, les agradará tremendamente.
Nota: En la gráfica, una imagen de la prestigiosa Universidad Simón Bolívar, en Caracas.
