martes, 16 de noviembre de 2010

¿Es la PAZ un Derecho Humano?


RECOMENDACIONES DE LA SEMANA

RADIO COMUNIDAD
PROPAZ EN LA RADIO
www.propaz.org
Pedro J. Ramírez Perdomo
Lunes, 15 de noviembre de 2.010

Toda la historia de la humanidad está marcada por el vaivén entre los periodos de Guerra y de Paz. Los deseos de conquista y de poder, de ambiciones, de posesión de riquezas, han marcado etapas oscuras de dolor y pena. En cambio los periodos de bienestar, progreso, superación y desarrollo se han desenvuelto dentro de lapsos de paz. Ha sucedido a nivel de Estado, de país o Nación, al igual que a nivel de familia y de individuo. Hay guerras que se producen en la mente de cada persona, que las convierte en su interna naturaleza, muy difícil de erradicar. Ven el conflicto en todas partes y se encuentran continuamente a la defensiva, porque están habituados a pensar mal. Con absoluta certeza afirman ¡Piensa mal y acertarás!, y por donde transitan van armando el conflicto, la rebelión, el descontento, porque es esa su naturaleza. Sin embargo hay quienes afirman ¡Piensa bien y acertarás!, lo que resulta igualmente cierto, puesto que su naturaleza es pacífica, ven la solución en todas partes, no inculpan a otros de sus propios errores y van organizando todo, construyendo y mejorando lo existente. Cuando un País, a través de sus gobernantes se prepara para la guerra, destina grandes recursos, que si fuesen usados para la paz, serían más útiles. Prepararse para transformar el agua de mar en potable con grandes depósitos para ser almacenada y distribuida a la población; usar la energía solar, la de los vientos, la de las corrientes marinas, para tener a disposición electricidad; preparar los campos para los cultivos; construir escuela y universidades, para la educación; hospitales y viviendas para todos; es preparase para la paz, para el progreso y el bienestar. Eso es poner en marcha ese derecho intangible y sutil que constituye la paz. La paz, no solo es la ausencia de guerra, ni es la que se encuentra en la sepultura. Es una sensación interior que permite que el ser humano pueda resolver conflictos de una manera pacífica, porque tiene en su mente la capacidad y la posibilidad de ver la solución, de conseguir la fórmula perfecta para llegar al acuerdo equilibrado. Todo gobierno tiene como principal deber respetar el derecho ajeno, y la paz es un derecho y nosotros como individuos tenemos el deber de mantenernos en paz. Por ello recomendamos comenzar todas nuestras acciones con un simple pensamiento de paz, para resolver de una manera pacífica, positiva y afirmativa todas las situaciones que se nos presenten durante el día, contribuyendo a crear un mundo de paz.